Peugeot presenta en China el concept híbrido SXC




Peugeot presenta estos días su concept SxC en el Salón del Automóvil de Shanghái. Un modelo híbrido que ha sido diseñado y desarrollado por los estudios de diseño “China Tech Center” que la empresa francesa tiene en la misma ciudad donde se desarrolla el evento. Además, el nombre SXC es sinónimo de “Shanghái Cross Concept”, y Peugeot asegura que el vehículo ha sido pensado para adaptarse a los gustos de los compradores chinos.

Con una longitud de 4,87 metros, una altura de 1,61 y una anchura de 2,03 metros, el SxC es un elegante crossover de gran tamaño. Para que os hagáis una idea, es ligeramente más grande que el Lexus RX y casi igual de largo que un BMW X6. El prototipo de Peugeot ofrece una mezcla de los estilos vistos en los últimos concept cars de Peugeot, como el SR1, HR1 y el EX1.

La parte delantera es especialmente llamativa gracias a una parrilla única “flotante” y a unos afilados grupos ópticos de tecnología LED. Dos generosas tomas de aires colocadas en el paragolpes y un capó esculpido potencian la imagen deportiva a la par que elegante del SXC. A lo largo de su carrocería se aprecian numerosos componentes de aluminio cepillado, como la rejilla, las barras de techo y el borde de la superficie lateral acristalada, un material, que además de ligero realza el carácter exclusivo del vehículo.

De perfil, el concept de Peugeot, ofrece el aspecto de un coupé, con sistema de apertura de puertas en espejo, mientras que las luces traseras en forma de boomerang y el espectacular diseño del portón trasero dominan su zaga.



En su interior los cuatro pasajeros disponen cada uno de su asiento y comparten techo panorámico. La forma del tablero de instrumentos, el volante y las pantallas táctiles que rodean el puesto de conducción recuerdan a la cabina de un avión de combate. La consola central está elevada y el head-up display se encarga de proyectar la información relativa al vehículo sobre el parabrisas.

El Peugeot SXC incorpora la tecnología HYbrid4, con un motor de combustión interna para el eje delantero y un motor eléctrico para las ruedas traseras. Esta tecnología permite que las cuatro ruedas sean motrices cuando ambos propulsores trabajan simultáneamente. Bajo el capó se esconde el motor térmico turboalimentado de 1.6 litros de gasolina con una potencia de 218 CV, mientras que el motor eléctrico de 70 kW (95 CV) es el responsable de impulsar las ruedas traseras. En total, el SXC tiene 313 caballos de fuerza con un consumo medio de 5,8 litros/100 km, mientras que sus emisiones de CO2 se sitúan en los 143 g/km.

El SxC es capaz de moverse en modo cero emisiones a baja velocidad utilizando únicamente el motor eléctrico, aunque Peugeot no ha desvelado por cuánto tiempo.

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