Que es un amortiguador, cual es su función exacta, que fenómenos se observan durante la fase de envejecimiento... Hay que reconocer que muy pocos de nosotros tenemos una idea precisa sobre esta cuestión. Sin embargo, hay que admitir que este elemento desempeña una función muy importante en materia de seguridad activa.
SU FUNCIÓN
SU FUNCIÓN
Junto al amortiguador, un conjunto de órganos constituyen la suspensión de un vehículo, la cual se encarga de asegurar una unión elástica entre las ruedas y la carrocería, teniendo como cometido evitarle a esta, el caos generado por las irregularidades de la carretera, así pues la función del amortiguador es;
• Mantener las ruedas en contacto con el suelo sea cual fuere el estado de la carretera.
• Dominar la oscilación de la suspensión sin oponerse al juego normal de los resortes.
• Absorber los rebotes y estabilizar individualmente cada rueda.
• Evitar las vibraciones en el habitáculo y reducir la pérdida de adherencia entre los neumáticos y la carretera.
¿POR QUÉ SE GASTAN LOS AMORTIGUADORES?
¡A los 20.000 km, un amortiguador ha funcionado como mínimo un millón de veces!
Están sometidos a un desgaste natural y progresivo asociado:
• a los kilómetros recorridos,
• a la carga del vehículo,
• al estilo de conducción,
• al perfil de la carretera.
LOS SIGNOS DE DESGASTE
• Tendencia anormal del vehículo a desviarse en las curvas cerradas.
• “Traqueteo del vehículo” en las curvas grandes.
• Crujidos sordos constatados a la hora de pasar por un badén.
• Pequeños saltos de las ruedas en la aceleración, conllevando una pérdida de adherencia.
• Fuga de aceite aparecida sobre el cuerpo del amortiguador.
• Desgaste anormal de los neumáticos.
RIESGOS ASOCIADOS AL DESGASTE
Su distancia de frenada puede aumentar hasta un 35 %.
• La sensibilidad de su vehículo al acuaplaning puede llegar a ser más importante (+15 %).
• Sus neumáticos pueden llegar a reducir hasta un 25 % su vida.
• Las piezas circundantes corren mas riesgo de deteriorarse: articulación de trasmisión, rótulas de suspensión, soporte motor, etc.
Particularmente exigente con los elementos de seguridad, la ITV es inflexible con el estado de los amortiguadores.
Desde el 1 de enero de 2008, si se detecta una fuga de aceite, ésto conlleva tener que realizar una revisión. No dude en hacer controlar sus amortiguadores por un especialista, es la mejor manera de evitar disgustos de tener que pasar una revisión.
Los amortiguadores de origen ofrecen una excelente calidad y responden a un pliego de condiciones muy estricto.
Al elegir los amortiguadores originales Peugeot para su sustitución, usted se beneficia de una garantía de 1 año en las piezas de recambio originales, en caso de defecto no asociado al desgaste.
RECOMENDACIONES
Haga revisar sus amortiguadores por su especialista cada 20.000 km.
Si observa algún signos de desgaste, diríjase rápidamente a su Taller. Haga que le revisen los topes de rebote a la hora de cambiar los amortiguadores, y en caso necesario, no dude en cambiarlos.
RECUERDE
Tener los amortiguadores en buen estado refuerza su seguridad.
El desgaste natural de sus amortiguadores es muy progresivo. Inconscientemente usted adapta su conducción a esta degradación. Por tanto este deterioro no visible tiene consecuencias nefastas para su confort y sobretodo para su seguridad.
Los amortiguadores desgastados degradan:
• SU AGARRE EN LA CARRETERA. Causan pérdida de adherencia en las curvas, pérdida de manejo de la dirección y elevado riesgo de acuaplaning.
• SU FRENADA. Aumento peligroso de la distancia de parada: 2,60 m a 50 km/h (es decir el ancho de un paso de peatón) y hasta 6 m con lluvia (incluso para un vehículo equipado con el sistema ABS).
• EL ESTADO GENERAL DE SU VEHÍCULO. Desgaste prematuro de muchas piezas, en particular los neumáticos, cuyo desgaste aumenta de un 25 % únicamente por el hecho de tener unos amortiguadores desgastados al 50 %.
• SU CONFORT DE CONDUCCIÓN Y EL DE SUS PASAJEROS. Brusquedad en la frenada, falta de uniformidad en la aceleración y balanceo acentuado en las curvas.
Tener los amortiguadores en buen estado contribuye a un mejor agarre en la carretera de su vehículo y a una frenada más eficaz.
¡A los 20.000 km, un amortiguador ha funcionado como mínimo un millón de veces!
Están sometidos a un desgaste natural y progresivo asociado:
• a los kilómetros recorridos,
• a la carga del vehículo,
• al estilo de conducción,
• al perfil de la carretera.
LOS SIGNOS DE DESGASTE
• Tendencia anormal del vehículo a desviarse en las curvas cerradas.
• “Traqueteo del vehículo” en las curvas grandes.
• Crujidos sordos constatados a la hora de pasar por un badén.
• Pequeños saltos de las ruedas en la aceleración, conllevando una pérdida de adherencia.
• Fuga de aceite aparecida sobre el cuerpo del amortiguador.
• Desgaste anormal de los neumáticos.
Su distancia de frenada puede aumentar hasta un 35 %.
• La sensibilidad de su vehículo al acuaplaning puede llegar a ser más importante (+15 %).
• Sus neumáticos pueden llegar a reducir hasta un 25 % su vida.
• Las piezas circundantes corren mas riesgo de deteriorarse: articulación de trasmisión, rótulas de suspensión, soporte motor, etc.
Particularmente exigente con los elementos de seguridad, la ITV es inflexible con el estado de los amortiguadores.
Desde el 1 de enero de 2008, si se detecta una fuga de aceite, ésto conlleva tener que realizar una revisión. No dude en hacer controlar sus amortiguadores por un especialista, es la mejor manera de evitar disgustos de tener que pasar una revisión.
Los amortiguadores de origen ofrecen una excelente calidad y responden a un pliego de condiciones muy estricto.
Al elegir los amortiguadores originales Peugeot para su sustitución, usted se beneficia de una garantía de 1 año en las piezas de recambio originales, en caso de defecto no asociado al desgaste.
RECOMENDACIONES
Haga revisar sus amortiguadores por su especialista cada 20.000 km.
Si observa algún signos de desgaste, diríjase rápidamente a su Taller. Haga que le revisen los topes de rebote a la hora de cambiar los amortiguadores, y en caso necesario, no dude en cambiarlos.
RECUERDE
Tener los amortiguadores en buen estado refuerza su seguridad.
El desgaste natural de sus amortiguadores es muy progresivo. Inconscientemente usted adapta su conducción a esta degradación. Por tanto este deterioro no visible tiene consecuencias nefastas para su confort y sobretodo para su seguridad.
Los amortiguadores desgastados degradan:
• SU AGARRE EN LA CARRETERA. Causan pérdida de adherencia en las curvas, pérdida de manejo de la dirección y elevado riesgo de acuaplaning.
• SU FRENADA. Aumento peligroso de la distancia de parada: 2,60 m a 50 km/h (es decir el ancho de un paso de peatón) y hasta 6 m con lluvia (incluso para un vehículo equipado con el sistema ABS).
• EL ESTADO GENERAL DE SU VEHÍCULO. Desgaste prematuro de muchas piezas, en particular los neumáticos, cuyo desgaste aumenta de un 25 % únicamente por el hecho de tener unos amortiguadores desgastados al 50 %.
• SU CONFORT DE CONDUCCIÓN Y EL DE SUS PASAJEROS. Brusquedad en la frenada, falta de uniformidad en la aceleración y balanceo acentuado en las curvas.
Tener los amortiguadores en buen estado contribuye a un mejor agarre en la carretera de su vehículo y a una frenada más eficaz.
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